Absuelven al ciclista francés que se pasea desnudo por Gipuzkoa

Irwin, el ciudadano francés juzgado la semana pasada en San Sebastián por desobediencia a un agente de la Ertzaintza que lo arrestó cuando paseaba sin ropa por Errenteria, fue absuelto al no existir ninguna ordenanza municipal que impida transitar desnudo por la vía pública.

El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de la capital guipuzcoana señala que no se puede argumentar por tanto la «legitimidad de la orden» dada por el ertzaina que lo detuvo, ya que «todo aquello que no está legalmente prohibido está permitido», según «el principio de autodeterminación y libertad proclamado por la Constitución». «Resulta evidente que la conducta del denunciado, con independencia de las valoraciones morales que merezca, no es susceptible de constituir ilícito penal alguno», destaca el juez en su sentencia.

El fiscal había solicitado una multa por una falta de desobediencia al agente que detuvo a Irwin el pasado 1 de julio en una rotonda cercana a la comisaría de la Er-tzaintza de Errenteria.

El Ministerio Público tendrá que decidir ahora si recurre este fallo, al igual que ha hecho con el auto del Juzgado de Instrucción número 5 que archivó otra denuncia contra Irwin por pasear desnudo el pasado 15 de mayo por la zona del Peine del Viento de San Sebastián. En este caso, el juez acordó el sobreseimiento provisional al no considerar suficientemente justificada la comisión de una infracción penal como le imputaba la Fiscalía, la cual señala en su recurso que los hechos podrían ser constitutivos de un delito de exhibicionismo sexual.

«Exhibicionismo»

El Ministerio fiscal indica en ese recurso que los agentes que lo detuvieron observaron «una clara actitud de exhibicionismo» y pone como ejemplo que, mientras los policías hablaban con él, «colocaba los brazos en jarras frente al público que miraba la intervención y realizaba fotografías».

Esa circunstancia denota, a juicio del fiscal, que «pasear o tomar el sol desnudo y hacerlo precisamente fuera de los lugares habilitados en las playas, no obedece a una ideología naturista, sino a una voluntad exhibicionista que puede perjudicar a los menores de edad».

«Afirma el imputado que lo hace para llamar la atención de la gente sobre el juicio de las apariencias, pero en ningún caso tal finalidad puede vulnerar u ofender el derecho a la integridad o indemnidad sexual de un menor de edad o incapaz», añade el fiscal.

La defensa de Irwin impugnó este recurso, que podría resolver la Audiencia de Gipuzkoa en el probable caso de que lo rechace Instrucción 5, y en su escrito alega que «no hay nada impúdico en estar sin ropa si esto no va acompañado de actos de contenido o significación sexual».

Señala que el fiscal «se contradice» y se pregunta si «en la playa no se comete entonces el delito aun cuando haya menores».